TRISTEZA, SAUDADES Y FELICIDAD

TRISTEZA, SAUDADES Y FELICIDAD

Queridos amigos, hijos, hermanos, sobrinos y contactos virtuales, hoy 29 de Noviembre siento tristeza y congoja porque hace 30 años dejé de compartir tertulias doctrinarias, obligaciones religiosas y batuques memorables, hace 30 años que hizo su pasaje el médium Luiz Antonio da Silva que tenía como Eléeda a Exú Laná.

Lo tengo en bulto, o sea su Ota, cuidado y amado por su nieto José Luiz de Xangó, mi hijo carnal, tristeza por no poder pedirle la bença y no hacer que me retara porque no hacía las cosas como el me había enseñado, todos esos retos me sirvieron para ser hoy lo que soy y para llevar el nombre de ése Orixá muy en alto.

Tristeza por no compartir, congoja por saber que al hacer su pasaje Luiz mi amigo, hermano, Pai, suegro y todos los adjetivos que podría tener, por saber que desde el Orun nunca me sacó su protección, me orientó en un camino con espinas, traiciones y no sé más que hasta que conseguí alcanzar mi felicidad la cual llegó a mi vida por intermedio de una personita mimosa, querida y que hoy es mis ganas de vivir, 29 de Noviembre cumpleaños de Exú Laná del Pai Luiz, 30 de Noviembre cumpleaños de ésta personita que es mi esposa que me acompaña y me paparica hace varios años lo cual no sé cómo decirle Feliz cumpleaños mi amor.

Exú Laná, Babá luiz y Zulema de Oxúm TRISTEZA, CONGOJA Y FELICIDAD, lo entienden?

Que el Pai Xapaná los cubra con su manto y que compartan conmigo estos momentos.
Gracias.

Babá José de Xapaná

REGRESO A LA FE

REGRESO A LA FE

Queridos amigos. Como ustedes saben el 17 de Octubre de éste año cumplió mi Pai Xapaná 47 años en la vasija, de esos 47 años 17 años conviví junto con mi Babá del cual hasta hoy lo admiro y lo añoro.

En el tiempo que yo empecé no existían las armas que existen hoy para la propagación de la Religión, cuando comencé a venir a la Argentina accidentalmente que les confieso no era mi deseo, al encontrar un pueblo de fe pensé en construir una familia religiosa con lo poco o mucho que aprendí al lado del Pai Luiz.

Hace 30 años prácticamente que estoy en la República Argentina, la he adoptado como mi segunda patria, en éstos 30 años ha avanzado mucho la manera de comunicación y cuánto lamento que con éste avance, con éste progreso no hemos sabido construir un pueblo de fe y de respeto.

Había perdido las esperanzas, porque leí y constaté que en vez de usar estos medios virtuales para engrandecer la Religión, lo cual podríamos hacerlo muy bien intercambiando conocimientos, instruyéndonos con los más experimentados, podríamos construir una hermosa unificación de Naciones, pero la decepción fue grande en el día a día al ver en estos medios discusiones estúpidas e ignorantes tratando de desmerecer unos a otros sin el mínimo decoro y respeto hacia personas con trayectoria y ustedes han de convenir conmigo cuán grande fue mi decepción.

Pero, renuevo mi fe, al ver que en nuestros espacios virtuales tanto míos como de mi esposa hemos tenido respuestas de más de 5.000 seguidores, la mayoría con avidez de conocimientos queriendo intercambiar ideas para que nuestra Religión ocupe el lugar que le corresponde en la Sociedad.

Hemos recibido escritos de todas partes del mundo los cuales nos enorgullecen por haber sido promotores de esto.

¿Por qué será que todos o esta pequeña minoría de equivocados religiosos no se alinean a nuestras filas y con respeto demuestran sus conocimientos para que todos podamos aprender?

Pero queridos amigos, renuevo mi fe porque ustedes mis amigos seguirán intercambiando en nuestros espacios en público o en privado el deseo íntimo que todos tienen de hacer las cosas bien hechas.

Dejemos que los perros ladren y sigamos nuestro camino, se que estos 5.000 se duplicarán y triplicarán porque hay gente que quiere hacer una buena Religión.

Renuevo mi fe en ustedes y sigo en la lucha, como siempre con las puertas abiertas de mi corazón y de mis pocos conocimientos los cuales no tienen secreto para ustedes.

Les envío un fuerte abrazo y que mi Pai Xapaná los bendiga, el amigo de siempre: Babá José de Xapaná